
Imagen de las inundaciones en la zona sur de Ávila el pasado mes de marzo (foto: Rmstudios/Ical) y, en el recuadro, Francisco Martín Jiménez, uno de los impulsores de la plataforma
"Puede volver a pasar": más de 200 vecinos de Ávila se unen en una plataforma para exigir medidas y evitar inundaciones
Habitantes de la zona sur de la ciudad, en el entorno de la Plaza de Toros, comienzan a organizarse en una plataforma para exigir al Ayuntamiento actuaciones preventivas.
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Dos siempre son más que uno. Y decenas y centenas más que unidades. Es bajo esta idea con la que está comenzando una insurgencia o levantamiento vecinal en la zona sur de Ávila. En concreto, entre los habitantes del entorno de la Plaza de Toros, afectados por las inundaciones tras el desbordamiento de los ríos Chico y Adaja en marzo.
"Puede volver a pasar y creemos que hay medidas básicas que lo pueden prevenir", reivindica en declaraciones a EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León Francisco Martín Jiménez, uno de los impulsores de la Plataforma en defensa de la limpieza de los ríos de Ávila y vecino afectado en la calle Maldonado.
Su garaje fue la principal víctima, inundándose por completo y llegando el agua incluso al portal, que está un metro por encima de la calle. Más de 200 vecinos se han unido a esta iniciativa ya que busca que las Administraciones públicas asuman responsabilidades para prevenir futuras inundaciones. Principalmente, a su juicio, el Ayuntamiento de Ávila.

Carteles que han empezado a colocar en las zonas afectadas por las inundaciones en la zona sur de Ávila
La situación les ha llevado a organizarse en una plataforma de afectados con el fin de que el Ayuntamiento de Ávila atienda a sus peticiones, una vez que a título personal han sentido que sus reclamaciones no están siendo atendidas. "Estamos aún en una fase incipiente, a través de un grupo de Whatsapp", apunta.
A estas alturas, además de esta comunidad de WhatsApp, también se han reunido con distintas asociaciones vecinales que han comprometido su apoyo a la plataforma. También, asegura Francisco, contarán "en principio" con el refuerzo de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Ávila (FAVA), que aglutina a 15 de ellas.
En concreto, son tres medidas principales las que llaman a tomar. La primera de ellas es la limpieza y desbroce de los cauces. Una competencia que, según subraya Francisco Martín, es municipal cuando el cauce transcurre por zona urbana.
Ante esto, afirma que la respuesta del alcalde fue que se dirigieran a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), ya que es esta quien ostenta dicha titularidad. Sin embargo, es una afirmación que Francisco niega, atendiendo al Plan Hidrológico Nacional, que en su artículo 28.4 de la Ley 10/2001, de 5 julio, dice:
"Las actuaciones en cauces públicos situados en zonas urbanas corresponderán a las Administraciones competentes en materia de ordenación del territorio y urbanismo, sin perjuicio de las competencias de la Administración hidráulica sobre el dominio público hidráulico. El Ministerio de Medio Ambiente y las Administraciones Autonómicas y Locales podrán suscribir convenios para la financiación de estas actuaciones".
Cabe resaltar que dicha Ley fue modificada por la Ley 11/2005, de 22 de junio, sin que el artículo citado sufriese ningún tipo de alteración o derogación, manteniéndose en los mismos términos que surgiese en su origen.
Por otro lado, reclaman también el dragado de los cauces para que "vuelvan a tener la profundidad que tenían y sea más difícil que se pueda desbordar". Por último, exigen la construcción de un muro de contención, de un metro de altura, en el parque del Soto que evite que el agua salte a la AV-900 y, por tanto, a las viviendas. "Ahí hay también un paseo peatonal, si se construye ahí haría de presa", apunta Francisco.
Reconociendo que el tren de borrascas que azotó a la ciudad durante el mes de marzo "no es culpa de nadie", sí lamenta que el problema ha sido el estado de los cauces de los ríos. Además, señala que a comienzos del mes ya hubo un "primer aviso", del que advirtieron al Ayuntamiento de Ávila pero no lograron ninguna prevención.
Martín Jiménez resalta que los cauces de los ríos están "sin desbrozar, con muchísima vegetación, basura y muchísimo sedimento que se ha ido acumulando a lo largo de los años".

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En este sentido, explica que la última actuación para sacar sedimentos fue hace "más de 20 años" y en 2018 para "limpiar algo de vegetación". Un contexto que ha hecho que, por ejemplo, el río Adaja haya "perdido muchísima profundidad" y, por ende, "se desborda mucho antes".
"En el río Adaja toda la vida se ha sacado arena para construcción y llevamos muchísimos años sin dejar sacarla", insiste. Este vecino de Ávila admite que los desbordamientos son "más o menos frecuentes", sucediéndose cada dos o tres años, pero estos solo afectaban a una "zona muy cercana" al cauce. "Jamás había alcanzado las viviendas ni nada parecido", destaca.
Noche del jueves al viernes
Aquel día, Francisco recuerda que en su bloque, formado por siete viviendas, estuvieron sin poder salir de sus domicilios durante "tres o cuatro horas". Tras lo vivido, lamenta que no fue "hasta el domingo por la mañana" cuando apareció alguien del Ayuntamiento de Ávila.
Fue justamente al propio alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, a quien reclamaron directamente una decena de vecinos que estaba limpiando, que tomase alguna medida, pero este, según denuncia Francisco, les acusó de haberse equivocado por haber comprado una vivienda en una zona inundable.
"En ningún momento en ninguna nota simple de ningún edificio pone que es zona inundable", asegura Francisco, quien también denuncia que desde el Ayuntamiento no les pusieron ningún contenedor hasta el domingo a pesar de saber que "teníamos que sacar toda la basura".
"Hasta las 14:00 del domingo, habiéndose inundado todo, no nos puso ni un solo contenedor. Tuvo que venir un camión del servicio de limpieza, que se llenó entero", relata.
Además, tras emplazar el regidor a los vecinos a que hablasen con la CHD para que actuase sobre el cauce, siempre según este vecino, Francisco matiza que la "competencia y mantenimiento es municipal en zona urbana".
"Eso es lo que el alcalde no sabe, o quiere evadir sus responsabilidades, que es lo que los vecinos no estamos dispuestos a aguantar", asegura con rotundidad.
En cualquier caso, subraya que "se ha dañado la Plaza de Toros, el campo de fútbol, que son instalaciones municipales" y, por lo tanto, "él (el alcalde) como perjudicado, en el peor de los casos de que no fuera su competencia, que sí la es, tendría también que reclamar a la CHD la limpieza de los cauces".
En cuanto al muro que solicitan en el parque de El Soto, señala que se han encontrado con la respuesta por parte del concejal competente de que "no es municipal". "Un parque que han hecho una obra hace dos años, que han puesto un letrero y que se han estado haciendo fotos", resalta.
Un "esperpento" para este vecino que, ahora bien, señala que el muro se podría hacer "incluso fuera del parque", en una zona pegada al paseo peatonal que hay entre el parque y la carretera.

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A día de hoy, Francisco y sus vecinos de bloque continúan con el garaje inutilizado, a la espera de que se restablezca la instalación eléctrica y el sistema de detección de incendios. No obstante, señala que esta plataforma que se está formando se extiende por varias comunidades más.
En concreto, señala que también se están organizando con las cuatro viviendas unifamiliares que hay en frente de su bloque, una comunidad aledaña de más de 70 vecinos, otra de 20 viviendas unifamiliares, una más de otras 18 viviendas unifamiliares y un bloque de 16 viviendas y la constructora que está haciendo unos nuevos chalets.
"El Ayuntamiento ha otorgado licencia a pesar de que dice que es zona inundable y con los mismos requerimientos que tenían hace 20 años. ¿Por qué entrega licencia con un bajo rasante en vez de obligar a no edificar aquí?", se pregunta Francisco Martín Jiménez.
Mientras la organización vecinal se va conformando, a nivel particular cada comunidad va adoptando las medidas necesarias al objeto de mitigar o prevenir futuras inundaciones. Así, en el bloque de este afectado señala que están presupuestando unas puertas nuevas para el garaje y estudiando la compra de barreras anti inundaciones.
Asimismo, asegura que en el caso de no llegar a buen puerto con la plataforma, no descartan recurrir con la asociación de vecinos o formar algún tipo de organización con personalidad jurídica y asesorados.
EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León ha tratado ponerse en contacto con el Ayuntamiento de Ávila en varias ocasiones desde el pasado 15 de abril para conocer su versión, pero hasta la fecha no ha recibido respuesta.