Los proveedores de automoción piden a la Administración un plan Renove tras recortar sus ingresos en 2024

Todo ello lo han reclamado en un contexto en el que a lo largo del pasado ejercicio la facturación del sector se redujo un 0,7% en la comparativa interanual, hasta alcanzar los 41.238 millones de euros.

Pero desde la patronal también han advertido de los escasos márgenes con los que operan las empresas auxiliares del automóvil. Por este motivo, Sernauto ha insistido en la importancia de prolongar la colaboración público-privada mediante instrumentos como los Pertes.

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La cifra de negocio de las empresas auxiliares del automóvil cayó el año pasado por primera vez tras dos ejercicios seguidos de crecimiento. De hecho, el alza registrada en 2023 fue del 10,3%, al tiempo que en 2022 registró un aumento del 17,8%.

Las exportaciones se mantuvieron estables, con un total de 25.065 millones de euros, un 0,3% menos en la comparativa interanual. De hecho, supuso cerca del 60% de la facturación total del sector.

José Portilla, director general de Sernauto, ha comentado que "el componente español sigue siendo valorado por el efecto competitivo".

La inversión en capacidades productivas también registró un descenso del 12,3% en la comparativa interanual, hasta superar los 1.466 millones de euros.

Asimismo, la inversión en I+D+i se redujo un 2% en la comparativa interanual, hasta situarse en los 1.245 millones de euros, lo que equivale al 3% de la facturación.

En términos de empleo, el sector ocupó el año pasado a un total de 325.200 personas, lo que supone 7.350 empleados menos frente a 2023. El empleo directo se mantuvo estable, con 203.250 trabajadores, hasta 1.400 personas menos frente al ejercicio anterior.

Europa, a la baja

Francisco J. Riberas, presidente de Sernauto y presidente ejecutivo de Gestamp, ha señalado que el año 2024 "en términos globales de producción fue bastante flojo y en línea con los últimos años".

Cabe recordar que en 2024 se produjeron en todo el mundo un total de 92.504.338 vehículos, lo que supuso una caída del 1% en la comparativa interanual, o algo menos de un millón menos de unidades fabricadas.

El directivo ha aseverado que ven una "ralentización respecto a los objetivos de electrificación que se marcaron los fabricantes hace dos o tres años".

De cara al presente ejercicio, Riberas asegura que "el mercado iba a estar plano". Ahora bien, el presidente ha reconocido que "cuando han llegado los aranceles, las ventas caerán en 1,5 millones de unidades".

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De este monto, "900.000 unidades se van a dejar de vender en Estados Unidos por el encarecimiento de las importaciones de componentes". En el Viejo Continente, Riberas ha comentado que "el mercado europeo tampoco se va a recuperar".

Sobre si se verán afectadas las empresas españolas de componentes de automoción, Riberas ha recordado que las exportaciones a Estados Unidos se situaron en los 1.021 millones de euros.

Ahora bien, el directivo ha asegurado que "donde se ven afectados los componentes españoles es por Alemania y Francia. Si esos vehículos no son vendidos, va a penalizar también a los componentes españoles que se exportan a Francia y Alemania".

Además, Riberas ha apuntado que las empresas españolas están "mirando al este". "Se están instalando producciones en Rumanía, Bulgaria, Turquía, la India y Brasil" como principales mercados de crecimiento en la producción de vehículos.

Sector de la Defensa

Preguntado por si la industria de componentes de automoción puede transformarse para surtir al sector de la Defensa, Riberas ha afirmado que "no creo que haya que reconvertir la industria de componentes en Defensa".

"Articular un ecosistema de Defensa será cosa de muchos años", ha señalado. Ahora bien, Riberas ha reconocido que "hay muchas empresas de componentes que podrían tener sinergias en el ámbito de la Defensa, aunque pueden ser necesidades puntuales".

El también presidente ejecutivo de Gestamp, una de las principales empresas de la industria de componentes de automoción, ha confirmado que han iniciado contactos entre empresas de Defensa y las de componentes.

"Los volúmenes que se manejan en defensa no tienen nada que ver con los del automóvil pero eso no significa que para algunas empresas sea algo a explorar", ha añadido.