El Rey Felipe VI a los mandos del PC-21 Omicrono Base Aérea de San Javier (Murcia)
Felipe VI se pone a los mandos del PC-21, el avión entrenador en el que volará la Princesa Leonor el próximo curso
Con motivo del Festival Aéreo Aire 25, Felipe VI se ha desplazado hasta la Base Aérea de San Javier, Murcia, donde se ha puesto a los mandos del nuevo avión.
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Durante su visita en el Festival Aire 25, que se celebra este fin de semana en la Base Aérea de San Javier (Murcia), Felipe VI ha subido por primera vez a la carlinga de esta aeronave turbohélice que sirve de entrenador avanzado en el Ejército del Aire y del Espacio.
El Rey despegó desde el aeródromo militar murciano a eso de las 17:18 bajo un intenso calor y rodeado de miles de asistentes que están visitando la exposición estática de aeronaves, algunas de ellas de Fuerzas Aéreas extranjeras como la francesa o la británica.
El vuelo de Su Majestad ha estado compuesto por dos aeronaves que han volado en formación. Con Felipe VI, compartiendo carlinga, ha estado el comandante Guzmán.
El Rey Felipe VI, subiéndose al avión entrenador PC-21 Omicrono Base Aérea de San Javier (Murcia)
Se trata del mismo modelo de aeronave en el que la princesa de Asturias realizará la instrucción aérea como parte de su entrenamiento militar, que actualmente lo realiza en la Armada, cuando comience su instrucción el próximo septiembre.
El PC-21 es la aeronave de cabecera de la Academia General del Aire tras la retirada paulatina de las últimas unidades del C-101. De hecho, el eje principal de la exhibición aérea murciana tiene como objetivo homenajear al C-101, la antigua aeronave escuela, que pondrá igualmente final a la Patrulla Águila.
La aeronave del fabricante suizo Pilatus Aircraft tuvo su primer prototipo operativo en 1997, pero no fue hasta julio de 2002 cuando se realizó el primer vuelo de prueba. El Ejército del Aire y el Espacio español empezó a recibir los pedidos en septiembre de 2021 y la última entrega se produjo este mismo junio, hasta llegar a las 24 unidades. El coste total del contrato para el Ministerio de Defensa alcanza los 205 millones de euros.
Se trata de una de las aeronaves más modernas en su clase y dadas sus características únicas se utiliza para el adiestramiento de pilotos en países como la propia Suiza, la primera en integrarlo en sus fuerzas aéreas, además de Australia, Reino Unido y Emiratos Árabes, entre otros. En total, se han construido más de 200 unidades.
Diagrama del Pilatus PC-21 del Ejército del Aire y el Espacio Omicrono
Uno de sus rasgos distintivos es que permite el entrenamiento completo de los pilotos a un coste muy inferior al de un avión a reacción convencional, como el propio C-101, hasta un 50% menos por piloto.
Es algo que va más allá del combustible que consume, sensiblemente menos que el C-101, y está relacionado con la construcción de su motor turboprop. Al ser un avión de hélice impulsado por una turbina Pratt & Whitney Canada PT6A, su mantenimiento también es mucho más sencillo y económico.
El Rey Felipe VI a su llegada a la Academia General del Aire y del Espacio en Murcia Omicrono
Tiene una longitud de 11,2 metros y una envergadura de 9,1 metros y dispone de espacio suficiente para los dos tripulantes, alumno e instructor de vuelo. Su peso en vacío supera por poco las 2 toneladas, mientras el máximo al despegue puede llegar a los 4.250 kilogramos, que se reducen a 3.100 en modo 'acrobático'.
El motor, que también se utiliza en aviones de entrenamiento similares como el Embraer EMB-314 Super Tucano, desarrolla 1.600 caballos de potencia, lo que permite al Pilatus PC-21 alcanzar una velocidad máxima de 685 kilómetros por hora y una autonomía de vuelo de 1.333 kilómetros. Su techo de vuelo se sitúa en los 11.580 metros, algo inferior al del C-101.
Últimas tecnologías
Además de su menor coste operativo y de mantenimiento, el verdadero motivo de la compra de estos aviones por parte del Ejército del Aire y el Espacio es que incorpora las últimas tecnologías, necesarias para instruir a los pilotos en el manejo de cazas de quinta generación y otras aeronaves, como el carguero Airbus A400M o los helicópteros NH90, totalmente digitalizados.
Así, los Pilatus permiten estrenar el Sistema Integrado de Enseñanza (ITS), del mismo fabricante suizo, que permite a alumnos y profesores la interacción con equipos y material actualizados. Y es que, junto a estas nuevas unidades, han llegado a la Base Aérea de San Javier nuevas estaciones de entrenamiento en tierra, con las que los alumnos de la Academia General del Aire empezarán a familiarizarse con los sistemas de los aviones más modernos.
La cabina del PIlatus PC-21 Omicrono
La base murciana donde se adiestran los pilotos ha recibido un sistema de entrenamiento de salida, en el que los aprendices son instruidos en cómo ponerse los cinturones y salir de la cabina en caso de emergencia. Además, cuentan con 5 simuladores y tienen planeado la integración de dos unidades más.
![Harrier en la cubierta del buque Juan Carlos I](["https:\/\/s1.elespanol.com\/2024\/12\/23\/omicrono\/defensa-y-espacio\/910919509_251911446_320x180.png"])
Los nuevos Pilatus PC-21 serán así parte integrante durante los próximos 30 años de la Escuela de Vuelo Básica, que tiene como finalidad la selección de los alumnos por especialidades fundamentales (caza y ataque, transporte, helicópteros y RPAS).
La Patrulla Águila en sus CASA C-101 Omicrono
Por su parte, los C-101 se darán de baja de forma progresiva, hasta dejar el stock en 28 unidades. Estas serán operadas exclusivamente por la Patrulla Águila, que seguirá usando estas veteranas aeronaves en sus exhibiciones hasta 2030.
